Foto: José Luis Municio García

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Inventario CE10332
Clasificación Genérica Pintura
Objeto/Documento Cuadro
Autor/a Barrón y Carrillo, Manuel (Lugar de nacimiento: Sevilla, 1814 - Lugar de defunción: Sevilla, 1884)
Título Vista de Sevilla desde Triana
Materia/Soporte Tabla
Técnica Pintura al óleo
Dimensiones Diámetro = 37,50 cm
Marco: Anchura máxima = 51,50 cm; Altura = 63 cm
Descripción Paisaje fluvial con vista urbana en el que se representa una vista de la ciudad de Sevilla desde el barrio de Triana, o bien desde Los Remedios (como se titulan otros cuadros del autor con similar panorámica), envuelta en una luz crepuscular. Técnicamente está ejecutado con un gran detallismo y preciosismo. Al fondo se aprecian los más destacados monumentos hispalenses, la Torre del Oro, que centra la composición, y la catedral con la Giralda. El cuadro plasma el trasiego en torno al río Guadalquivir, importante vía de comunicación y auténtica arteria de la vida de la ciudad en la época, por el carácter navegable de sus aguas, y cuyas riberas se convirtieron en lugar de reunión y paseo de los sevillanos.
Tanto en las orillas del río como en las embarcaciones se observa gran cantidad de personajes, representados a pequeña escala o algunos incluso meramente esbozados. En el primer término, una pequeña embarcación traslada a varios personajes ataviados con vistosos trajes populares andaluces y de la que desembarca una figura femenina, con falda de volantes y mantilla, ayudada por un hombre que porta una guitarra. Este tipo de escenas anecdóticas de tipo costumbrista contribuye a dotar al paisaje del carácter pintoresco que tanto gustó en la época.
El Guadalquivir se erige en el protagonista principal de las vistas sevillanas de Manuel Barrón, uno de los máximos representantes del paisajismo romántico andaluz, que firma y fecha este cuadro en Sevilla en 1851. Manuel Barrón se formó en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla entre 1828 y 1835, recibiendo también enseñanzas directas de Antonio Cabral Bejarano. En 1851 fue nombrado académico y desde 1872 hasta su muerte fue director de la Escuela. Perteneció también al Liceo artístico de Sevilla, foco del romanticismo en la ciudad hispalense, al igual que su homónimo en la capital.

La producción artística de Barrón estuvo dedicada fundamentalmente al paisaje, aunque en algunas ocasiones trató también el costumbrismo y el retrato. Entre todos los escenarios pintados por Manuel Barrón a lo largo de su fecunda carrera como paisajista, sus predilectos fueron la ciudad de Sevilla y sus alrededores, que pintó desde sus más diversos rincones y parajes. Este tipo de paisajes alcanzaron un enorme éxito en el mercado sevillano de su tiempo, tanto entre la clientela adinerada para ornato de sus residencias, como entre los visitantes extranjeros que acudían a la ciudad, atraídos por el pintoresquismo de sus monumentos y el exotismo de sus costumbres, adquiriendo este género de paisajes y escenas costumbristas de tema andaluz a modo de recuerdo de su viaje.
Sus visiones pintorescas del entorno local le convierten en el principal seguidor de las concepciones del escocés David Roberts y del ferrolano Genaro Pérez Villaamil, a quienes seguramente conoció durante su juventud en Sevilla.

El cuadro hace pareja con el número de inventario CE10333, titulado "En los aledaños de Sevilla", que en este caso representa un paisaje rural en torno al Guadalquivir.

(Catalogación: Rebeca Benito Lope, 2022)
Iconografia Paisaje urbano; Paisaje; Rio; Barco
Datación 1851
Contexto Cultural/Estilo Reinado de Isabel II (1843-1868)
Romanticismo
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Foto: José Luis Municio García

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